El sistema de etiquetado ambiental de la DGT ha sido una de las decisiones que más polémica han levantado en los últimos años. Aunque ya lo tengamos interiorizado, todavía se habla de posibles cambios por coches con distintivo ECO cuya eficiencia energética es bastante dudosa. Mientras eso ocurre, vamos a hablar de todos aquellos que se han quedado sin etiqueta y que ahora no pueden acceder a la Zonas de Bajas Emisiones de las ciudades (ZBE). Hay varias soluciones para revertir su situación, pero nada fácil ni barato.
En Madrid, desde este 2024, los coches sin distintivo ambiental (o los que son considerados como etiqueta A) no pueden acceder en todo el municipio a no ser que el coche esté domiciliado en la ciudad o que sean vehículos adaptados, históricos o de emergencias. Una restricción muy dura que afecta a todos aquellos modelos que gasolina del año 2000 hacia atrás o a los diésel matriculados antes de 2006. Son alrededor del 50 % de los ejemplares que todavía circulan por nuestras carreteras, así que vamos a hablar de cómo ponerle solución.
Matricularlo como histórico
Los vehículos históricos están exentos de las restricciones en ciudades como Madrid (aunque no en Barcelona). A falta de que salga una nueva normativa que regule a los coches más antiguos, una solución para poder entrar a las ciudades sin problema y sin el peso de las ZBE sería completar el proceso de matricular el coche como histórico.
Ya hemos visto que solamente puede realizarse con modelos que tengan más de 30 años y que aporta algunas ventajas adicionales, aunque el proceso sigue siendo algo tedioso. Con la nueva normativa podría agilizarse todo y así poder cuadruplicar el número de históricos a nivel nacional. El precio de todo el proceso actualmente está en torno a los 600 euros teniendo en cuenta la inspección profesional, la ITV o la tasa de tráfico…
Transformarlo a GLP
Otra medida que puede ser interesante para vehículos con menos de 30 años que no tienen etiqueta sería la conversión a GLP. Los coches que se mueven con este combustible alternativo son gratificados con el distintivo ECO y eso hace que se olviden de las restricciones y que tengan otras ventajas como pagar menos impuestos o aparcamiento. Además, cualquier modelo está sujeto a hacer el cambio, ya que es un trabajo relativamente sencillo.
Para transformar un coche para poder trabajar con gas licuado de petróleo hay muchos especialistas y eso hace que los precios se hayan rebajado. Por entre 1.500 y 3.000 euros se puede realizar el proceso para cambiar piezas como los inyectores, añadir un conversor o el propio depósito para el nuevo combustible. Además de la etiqueta ECO, también habrá ahorro a la hora de repostar debido al precio reducido del GLP.
Electrificarlo
El coche eléctrico será el futuro, o al menos eso parece viendo las normativas en nuestro continente. Así que otro tipo de transformación que podría ser factible para los vehículos más longevos y sin etiqueta sería una electrificación total. Es algo que ya se está haciendo por parte de algunas empresas, pero que tiene una cuestión. Y es que, al igual que su compra, todavía es algo muy caro. Pasar un coche de combustión a funcionar con un sistema de propulsión eléctrico puede costar de 10.000 euros en adelante.
Eso teniendo en cuenta los kits genéricos que están saliendo con motores eléctricos y una batería de tamaño compacto. Para modificaciones más exhaustivas habrá que preparar una cantidad aún mayor. Solamente tendría sentido para vehículos en muy mal estado o con un gran valor, porque también sería necesario un estudio y una homologación para que mantenga los estándares de seguridad. Con el conocido como «retrofit» se obtendría la etiqueta CERO de la DGT, pero a qué precio…
Cómo se pide la etiqueta
Una vez se haya conseguido la nueva homologación y pasada la ITV, toca conseguir la nueva y preciada etiqueta. Se puede adquirir en los siguientes puntos y tiene un coste de 5 euros (en algunos sitios más por gastos de envío y otros conceptos):
- Oficinas de Correos
- Red de talleres de la Confederación Española de talleres (CETRAA) y otras redes de talleres autorizados
- Gestores Administrativos
- Instituto de Estudios de Automoción (IDEAUTO)
- Para el caso de flotas se hace a través de la asociación Ganvam