El Mazda CX-3 2021 es una renovación para uno de esos SUV que no hace demasiado ruido en el mercado, pero que siempre debería ser una opción a ser tenida en cuenta. El modelo japonés se vuelve a renovar después de llevar inalterado desde 2018 y ahora mejora en algunos aspectos que eran necesarios. Incluye más tecnología, un equipamiento optimizado y una gama mecánica simplificada, entre otras cosas.
Si comenzamos por fuera, el Mazda CX-3 mantiene sus líneas tan reconocibles y el lenguaje de diseño Kodo de la marca. La parrilla cuenta con unos listones horizontales de diferente anchura, mientras que aparecen unas molduras en negro brillante para darle un aire distinguido. Cambian los diseños de llantas de 18 pulgadas, se suma el tono Polymetal Grey a la paleta de colores, se modifican los pilotos traseros y se anuncia una edición especial con más detalles estéticos.
En el interior sucede algo similar, pues el Mazda CX-3 mantiene sus líneas principales al tiempo que introduce algunas mejoras. El sistema multimedia MZD Connect cuenta con conectividad Apple CarPlay (inalámbrico) y Android Auto de serie, así como radio DAB+. Los asientos delanteros han sido rediseñados y puede elegir tres combinaciones de colores, destacando el uso de nuevos materiales. El acabado Evolution Design irá en blanco y beige para distinguirse del resto de la gama.
Mazda CX-3 2021. Motores
La gama mecánica del Mazda CX-3 se ha simplificado notablemente. Abandona por completo el diésel (antes tenías el Skyactiv-D de 115 CV) y solamente ofrece una variante de gasolina. El Skyactiv-G 2.0 es el absoluto protagonista en este modelo. Un bloque de cuatro cilindros y 2.0 litros que cuenta con tecnología de desactivación de cilindros (funciona solo con dos en algunas situaciones) y que se puede configurar con la caja de cambios manual de seis velocidades o con una transmisión automática con las mismas marchas.
En cualquier caso, solamente está disponible con tracción delantera y su potencia es de 121 CV y 206 Nm de par. Con el cambio manual es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 192 km/h, mientras que con el automático hace el 0 a 100 km/h en 9,9 segundos y su punta es de 187 km/h. Lo destacado es que consigue reducir sus consumos y emisiones un 14 % para dejarlos en 6,2 l/100km y 140 g/km de CO2 en el manual y 6,0 l/100km y 160 g/km en el automático.
Mazda CX-3 2021. Equipamiento
Otro punto donde mejora el Mazda CX-3 es en su equipamiento, concretamente en el dedicado a la seguridad activa. Cuenta con todas las tecnologías i-Activsense, que se amplían al recibir el sistema de asistencia a la frenada en ciudad avanzado (SCBS) capaz de detectar peatones por la noche. También se optimiza el encendido automático de luces y el control de crucero.
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