El Alzheimer es una enfermedad cada vez más común en las sociedades occidentales. Se trata de una demencia que genera problemas de memoria y de comportamiento, generalmente en edades avanzadas. Los síntomas van empeorando con el tiempo, en muchos casos hasta que la persona es totalmente dependiente. ¿Cómo saber si se va a padecer? Pues por ahora la ciencia no ha descubierto qué hace que unos lo sufran y otros no… pero una investigación sobre el modo de condiucir asegura que puede anticipar un 80 % de los casos.
¿Qué tiene que ver el Alzheimer con conducir? Uno de los primeros síntomas de esta dolencia es la dificultad para planificar o resolver problemas. Y la conducción es precisamente eso. Precisa ser capaz de controlar el vehículo y, al mismo tiempo, llevar control de lo que sucede en torno a él para poder reaccionar adecuadamente. Por eso mismo se necesita realizar test psicotécnicos antes de sacarse el permiso de conducir y a la hora de renovarlo. En ellos se comprueba que las capacidades físicas y mentales son las adecuadas.
Es por eso que un equipo de investigadores de la Universidad de Washington, aseguran que es posible predecir con antelación qué personas pueden padecer Alzheimer. Sí, incluso antes de que aparezca la propia enfermedad. Y con bastante precisión. en concreto ocho de cada diez casos se pueden predecir mediante la edad y la forma en que conduce un individuo.
Este estudio colocó un GPS en los vehículos de 139 voluntarios y realizaron un seguimiento de sus movimientos para establecer la relación entre la dolencia y el modo de conducir. Los separaron en dos grupos, por un lado 64 personas Alzheimer en fase preclínica (determinada por punciones lumbares), y por otro 75 con un nivel cognitivo normal.
Durante un año analizaron todos los movimientos y comportamientos de manera minuciosa: cuándo se producían acelerones o frenazos repentinos (y con qué freccuencia), si se superaban los límites de velocidad, movimientos bruscos, número de recorridos y distancia, desplazamientos nocturnos…
Tras analizar los datos descubrieron que los pacientes con Alzheimer diagnosticado conducían de forma más lenta, con cambios bruscos y menos trayectos por las noches, además de recorrer menos distancia. También visitaban menos destinos nuevos, centrándose en rutas conocidas.
Con los datos, diseñaron un modelo que podía predecir la probabilidad de que alguien tuviera Alzheimer preclínico solo con la edad y lo aportado por el GPS, con una precisión del 88%. La precisión del mismo aumentó hasta el 90% cuando se añadieron resultados de una prueba genética conocida como genotipo de la apolipoproteía E (APOE), que indica si puede haber riesgo heredado de la enfermedad.
«La forma en que las personas se mueven en su entorno cotidiano, desde los lugares que visitan hasta la forma en que conducen, puede decirnos mucho sobre su salud», asegura Sayeh Bayat, autora del estudio.
Fuente: Universidad de Washington