El diésel no está muerto. Vox Populi. El diésel no es tan sentido como la gasolina. Menos Vox Populi, pero no abriremos el melón. Hoy abrimos nuestros corazones al Manhart MH3 400D, la preparación extrema del Serie 3 de BMW que hará que te reconcilies con el diésel.
La buena gente de Manhart quiere cerrar el curso con una de esas modificaciones que te dejan a cuadros cuando la ves y cuando te das cuenta que es un motor diésel. Acostumbrados a que nos sorprendan y deleiten con customizaciones con base de gasolina ellos apuestan por dar una segunda pensada al motor diésel.
La base
No daremos por muerto al diésel por el momento y menos con la base con la que han trabajado en Manhart, el BMW M340d, la berlina mediana M Performance que en su versión más renovada hace que gires el cuello y mires dos veces la denominación D.
El M340D está propulsado por un motor de seis cilindros en línea de 3.0 litros. Doblemente turboalimentado, genera 340 CV de serie y 700 Nm de par. Datos que son una delicia y aun no hemos pasado por las modificaciones. Su transmisión automática de convertidor de par y ocho velocidades envía la potencia a las cuatro ruedas y recordemos que tiene versión touring.
A pesar de que por primera vez en la historia se venden más eléctricos que coches diésel,Alemania sigue siendo un mercado muy propicio para el diésel y por ello la marca de Múnich sigue apostando por desarrollos como el M340D. Cuando mercado e industria se alinean, llegan Manhart y hace las suyas.
Canela en rama
El nuevo MH3 400d cuenta con un motor mejorado de 380 CV y un par aumentado a 770 Nm, con un rendimiento más potente y un sonido más distintivo gracias escape de acero inoxidable trasero Manhart con control de válvulas y cuatro tubos de escape de 90 mm. Añadimos a la receta la unidad de control adicional Manhart MHTronik que le da unos caballos de potencia extra.
Además, la limusina de Munich ha sido personalizada con franjas decorativas plateadas y rojas, junto con piezas de carbono de la gama M Performance, como un borde de alerón para la parte delantera, tapa del maletero y un difusor para la parte trasera.
El vehículo presenta llamativas llantas Manhart Concave One internas con un diseño de cinco radios dobles y acabado en negro mate, con dimensiones de 9×20 pulgadas en la parte delantera y 10,5×20 pulgadas en la trasera, equipadas perfectamente bajo los guardabarros. El color de las llantas es totalmente configurable.
En el interior, los asientos deportivos M de fábrica incluyen refinados detalles en carbono, a saber, las levas de cambio de carbono y umbrales de puertas Manhart iluminados para un toque adicional de exclusividad.
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