Parecía algo que estaba destinado a pasar. El Nissan Pulsardejará de producirse en la fábrica de la Zona Franca de Barcelona a mediados de este mismo año. El compacto de la marca japonesa se estableció en nuestro país en 2014 y finalmente se ha tenido que despedir prematuramente debido a una serie de motivos. Los bajos índices de ventas y los altos costes de producción parecen ser los principales culpables.
El segmento C en España ha sido uno de los triunfadores en ventas en la última década (sino que se lo digan al SEAT León), sin embargo, el Pulsar no estuvo a la altura en ningún momento. No tuvo una gran acogida entre el público y las previsiones de la marca fallaron. En 2016 se esperaba vender 80.000 unidades en Europa y solo se llegó a 35.000 unidades, mientras que en 2017 descendieron a apenas 20.000 unidades.
Con una producción que se iba reduciendo año tras año, los costes se fueron haciendo insostenibles para la marca hasta llegar a la decisión de cesarlo. Pero el Pulsar no está solo, el segundo en decir adiós se trata del Nissan Evalia, un comercial que tampoco ha tenido demasiado éxito. Sí que seguirán el furgón NV200 y su versión eléctrica e-NV200. En la planta de Barcelona se llevará a cabo una reestructuración para que sus 4.800 trabajadores no se vean afectados.
Esto significa que se centrarán en la producción del trío de pick-up que comparten plataforma. Nissan Navara, Renault Alaskan y Mercedes Clase X serán los protagonistas en la fábrica barcelonesa en los próximos años. Sin embargo, con estos tres modelos será difícil llegar a la máxima capacidad de la planta que es de 200.000 coches al año.
Como reflexión final sobre el Nissan Pulsar, nosotros lo probamos hace tiempo y hay que reconocer que no se trata de un mal producto, pero puede que su enfoque fuera erróneo. Se trata de un coche amplio y cómodo, pero que desde el principio se percibía como algo anticuado. Además, la apuesta de la marca fue desde siempre a caballo ganador y con los Qashqai, Juke y X-Trail funcionando a toda máquina, el Pulsar quedó en el olvido.
Fuente – EconomíaDigital