Será en el próximo Salón de Amsterdam donde se presente en sociedad el nuevo Opel Adam Rocks S, una nueva versión que combina el toque aventurero del nuevo Opel Adam Rocks, con suspensión específica, protecciones para la carrocería y un techo practicable de lona, con la picante mecánica del Opel Adam S, el propulsor 1.4 Turbo con 150 CV de potencia.
Esa fusión se observa ya desde el exterior. Las protecciones de plástico negro y los anchos pasos de rueda reflejan su personalidad Rocks. La carrocería se puede elegir de once colores diferentes, que podrán combinarse con otros cinco tonos para el techo, entre ellos el nuevo rojo Red n Roll exclusivo de los S. Nos indica que estamos ante una versión deportiva el alerón trasero y el parachoques trasero, con un marcado difusor plateado que deja a la vista el tubo de escape. No faltan unas exclusivas llantas de 18 pulgadas.
Por supuesto, esta versión puede descapotarse casi en su totalidad gracias al techo de lona, que puede acciona con un botón situado en la parte frontal del techo y puede abrirse o cerrarse hasta los 140 km/h de velocidad. En el interior no faltan todos los aditivos estéticos y racing del Adam S, entre los que destacan los asientos deportivos firmados por Recaro.
Opel ya indica que, dentro de su equipamiento, como opción, el Adam Rocks S puede equipar el sistema Park Assist, control de ángulo muerto, así como el sistema de infoentretenimiento IntelliKINK que permite conectividad con tu Smartphone, pero habrá que esperar a conocer todos los detalles de la gama en España para confirmar este apartado.
Lo más reseñable respecto a otras versiones del Adam Rocks se encuentra bajo el capó. Allí se guarda el propulsor 1.4 Turbo de 150 CV de potencia, que genera un par máximo de 220 Nm. Asociado a una caja de cambios manual de seis relaciones, velocidades y se convierte en la opción más potente y prestacional de la gama Adam. Sus prestaciones alcanza una velocidad punta de 210 km/h (por los 220 km/h del Adam S) y acelera de 0 a 100 km/h en sólo 8,5 segundos. Equipa Stop/Start, gracias a lo cual su consumo medio homologado se queda en los 5,9 l/100 km con emisiones de 139 g/km de CO2.
Opel no ha descuidado el comportamiento de esta versión más prestacional. Ha reconfigurado la asistencia de su dirección y equipado con un potente equipo de frenos y una suspensión ideada para esta variante, pues rebaja la altura del conjunto en 15 milímetros, para situarlo a niveles de un Opel Adam… con lo que pierde la altura extra de las versiones Rocks. También endurecen sus muelles y amortiguadores para que su conducción sea más dinámica en curvas.
Fuente: Opel
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