Mercedes EQS 580 4MATIC, a prueba: volando en la primera clase eléctrica

El segmento de las berlinas de representación siempre ha sido uno de los mejor definidos. La fórmula clásica hablaba de modelos de tres volúmenes que rozaban (o superaban) los cinco metros de longitud, generalmente con plazas traseras muy amplias y cargadas de comodidades, pues el propietario podía viajar detrás en un alto porcentaje de los casos. Las mecánicas diésel también eran protagonistas, pues eran las que mejor se ajustaban a este tipo de vehículo. Aunque modelos como el MercedesEQS pretenden cambiar los esquemas y mirar al futuro.

Ahora que el diésel está prácticamente desaparecido debido a los demonios que han sido arrojados sobre él, tocaba adaptar los sistemas de propulsión. Las berlinas de lujo se han posicionado como el espécimen perfecto para recibir mecánicas eléctricas y en los últimos tiempos hemos visto cada vez más modelos con esa configuración. Además, se ha apostado por una evolución tecnológica muy marcada que convierte a estos vehículos en gadgets realmente avanzados. Vamos a comprobar si esta nueva generación de buques insignia electrificados tiene sentido.

Exterior

A nivel de diseño, la marca de la estrella lo tenía claro. El Mercedes EQS es el hermano mellizo en clave eléctrica del mítico Clase S, así que tenían que tomar esa imagen tradicional y mezclarlo con un toque futurista o de vanguardia. La base la puso el prototipo Vision EQS en el año 2019 y al poco tiempo llegó un modelo de producción que albergaba pocos cambios. Destaca por sus superficies limpias y sus líneas fluidas, algo que también han hecho para favorecer la aerodinámica. De hecho, llegó con cifras de récord que sorprendieron a todo el mundo.

El EQS presume de ser el vehículo de producción con el coeficiente aerodinámico más bajo del mercado. Se queda en 0,20 Cx gracias a una serie de componentes como la parrilla carenada, unos tiradores de las puertas que queda enrasados en la carrocería, los bajos carenados o el capó que se extiende hasta los pasos de rueda. En todo caso, también benefician esas llantas de 20 pulgadas (21 pulgadas en opción) o que la silueta sea similar a la que adoptaban los coupés de antaño.

Otras claves en el diseño del Mercedes EQS son los faros con tecnología Digital Light, capaces de proyectar formas por delante del vehículos, además de iluminar a la perfección de forma adaptativa. No pasan desapercibidos los detalles cromados en varios puntos o la tapa en el lateral para recargar el líquido limpiaparabrisas (porque no se puede abrir el capó). La zaga también es redondeada y estilizada con unos pilotos traseros LED unidos por el centro y una firma lumínica fina.

El Mercedes EQS tiene unas medidas que estarían más o menos entre las que presenta un Clase S convencional y uno de batalla extendida. Eso se traduce en 5.216 mm de largo, con 1.926 mm de ancho y 1.512 mm de altura; además de una distancia entre ejes que se va hasta los 3.210 mm. Como se puede ver, es un vehículo muy largo, aunque veremos que en su interior hay algunas peculiaridades a tener en cuenta.

Interior

Si hablábamos de evolución en el diseño exterior del Mercedes EQS, la verdad es que el interior es incluso más revolucionario. Se apuesta por la digitalización total y absoluta, algo que también suele ir ligado a los vehículos electrificados. Además, como en toda berlina de representación que se tercie, tenemos las últimas novedades de equipamiento de la marca de la estrella. Apenas quedan botones en este habitáculo en el que sobresale el MBUX Hyperscreen, que al ojo humano se presenta como una enorme pantalla que supera a las que la mayoría de usuarios tienen como televisor en casa.

En el mismo marco comparten espacio la instrumentación digital de 12,3 pulgadas, que sirve para mostrar la información principal para el conductor, con la pantalla táctil principal de 17 pulgadas y con otra que sorprende. La táctil es una de tecnología OLED que destaca por sus gráficos nítidos y también por su precisión. Es un sistema rápido y relativamente sencillo de utilizar, aunque requiere de cierto tiempo de aprendizaje debido al número de funcionalidades. Integra también controles de climatización y algunos relativos a la conducción, algo que no nos ha gustado.

Por suerte, el sistema MBUX siempre ha destacado por otros factores como es el control por voz avanzado. Es capaz de reconocer frases más complejas y de llevar a cabo muchas funciones sin que el conductor haga ningún movimiento ni aparte la vista del volante. Por otro lado, faltaba por sumar una tercera pantalla táctil de 12,3 pulgadas para el acompañante. Solamente se puede operar cuando detecta que hay una persona sentada en dicho asiento y permite controlar prácticamente las mismas funciones que la principal, pudiendo manejar esa persona todo el infoentretenimiento.

La calidad está en un nivel muy elevado en este Mercedes EQS. Con una berlina de lujo que supera las seis cifras no se podía esperar que se escatimase en gastos y todos los materiales están a la altura de lo esperado. La tapicería de cuero es muy aparente y se extiende por casi todo el habitáculo, mientras que se combina con otros materiales buena apariencia y tacto. Destacar otros detalles como la iluminación ambiental, aunque empaña un poco el conjunto algunos plásticos y también que el marco de la pantalla sea muy sucio.

Ya mencionamos al principio que en muchas berlinas de representación, el comprador acostumbra a viajar en las plazas traseras. Eso ha hecho que en el Mercedes EQS se haya cuidado su apariencia y no se haya reparado en detalles. Aunque está homologado para cinco plazas, la central no es tan aprovechable, donde se va como un marajá es en las laterales. Ambas son butacas que ya querrían muchos cines, pues tienen ajustes eléctricos y pueden quedar muy reclinadas. La comodidad que consiguen es envidiable.

Se completan con la calefacción, la ventilación y en masaje para que disfruten los usuarios en estos asientos. Suman incluso un cojín cervical (como en las delanteras) y más tecnología. Cuando no se utiliza el quinto asiento, se puede abatir para dejar un reposabrazos que incluye una tablet. Es totalmente extraíble y sirve para que se controlen las funciones del infoentretenimiento desde la parte trasera, así como otros detalles de confort.

Maletero

Aunque tenga apariencia de cuatro puertas, el Mercedes EQS no tiene portón, tiene una puerta completa con accionamiento eléctrico. Deja un acceso muy amplio y cómodo, dejando atrás el problema de otras berlinas en cuanto a lo que costaba dejar objetos en el fondo de su maletero. Además, en este caso hay una capacidad de 610 litros que es muy generosa y aprovechable en todos los sentidos. Supera incluso al del Clase S y destaca por tener ventajas como las redes y ganchos para repartir la carga.

También cuenta con un hueco bajo el piso en el que se pueden dejar los cables de carga para que no vayan sueltos ni molesten al usuario. Si la profundidad y el tamaño de la boca de carga ya sorprendían, también lo hace la capacidad total cuando se abate la segunda fila de asientos. Son 1.770 litros y se quedan muy por encima de la media, siendo un auténtico referente en este aspecto.

Motor

El Mercedes EQS se asienta sobre una nueva plataforma dedicada específicamente a coches eléctricos. Se llama Modular Electric Architecture (MEA) y es la prueba de que es algo totalmente distinto al Clase S convencional. Hay varias configuraciones para este modelo, con una de acceso de tracción trasera, una intermedia con tracción total que estamos probando y una variante de corte deportivo firmada por AMG.

EQS 450+: motor trasero de 333 CV
EQS 580 4MATIC: dos motores y 523 CV
EQS AMG 53 4MATIC+: dos motores y 658 CV

Es cierto que el Mercedes EQS ha recibido una actualización y que ahora hay más versiones disponibles, pero creemos que todavía puede ser una opción interesante. También podría aparecer en el mercado de segunda mano con precios más reducidos. La principal diferencia entre el que probamos y el actualizado es la arquitectura de 800 V para reducir los tiempos de carga. En todo caso, el EQS 580 4MATIC que hemos probado y sus 400 V no se queda demasiado atrás.

Comportamiento

Como decíamos, pusimos a prueba a la variante intermedia del EQS, aquel con tracción total y un nivel de potencia elevado, sin el toque deportivo que aportan las siglas AMG. El Mercedes EQS 580 4MATIC cuenta con dos motores eléctrico, uno trasero que es el bloque principal y un delantero que es secundario y que sirve para conseguir la tracción total. En conjunto son 523 CV y 855 Nm de par, cifras que pueden llegar a asustar por estar más cerca de la de modelos más deportivos. Pero el trabajo hecho en este ejemplar

Lo primero que destacaría de su comportamiento es el enorme nivel de refinamiento que se consigue en su habitáculo. Parece una burbuja totalmente aislada de lo que ocurre en el mundo exterior, con una insonorización sobresaliente y esa ausencia de ruido que es propia de los eléctricos. No hay sonido mecánico, pero tampoco aparece apenas ese característico sonido de la rodadura de los neumáticos o de la aerodinámica. Ya dijimos que se había trabajado en ese aspecto, y de qué forma… La principal premisa es la calidad de rodadura y eso queda demostrado.

Bastan pocos kilómetros para darnos cuenta de la suavidad que consigue el EQS. Trae de serie una suspensión neumática Airmatic que es la joya de la corona y que permite un nivel de confort superlativo. No hay miedo al asfalto roto ni a los resaltos, que son coser y cantar. Hay posibilidad de subir o bajar su altura manualmente, algo que agradecemos al salir de algunos parkings. También se regula su dureza en función a los modos de conducción. Cambian el carácter del eléctrico y permiten elegir entre Comfort, Eco, Sport e Individual.

Dejando a un lado esas sensaciones que consigue gracias a su ajustado chasis, toca hablar de prestaciones. Con ese nivel de potencia tan elevado, el EQS 580 4MATIC se presenta como un coche bastante rápido. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,3 segundos en el modo más deportivo y su velocidad máxima está limitada a 210 km/h. Las recuperaciones son brutales y te deja totalmente pegado al asiento, lo cierto es que no parece un coche de más de cinco metros que pesa más de 2,5 toneladas.

Efectivamente, uno de los puntos negativos del Mercedes EQS es ese peso tan elevado, que sale a relucir en cada frenada o en curvas lentas. Y eso que el chasis está bien ajustado y que cuenta con sistemas como el de la dirección a las cuatro ruedas. El motivo del peso no es otro que el tamaño de la batería. Con 107,8 kWh de capacidad es de las más grandes que hay en el mercado actual, no podía ser menos en este buque insignia eléctrico. Además, homologa una autonomía eléctrica de 668 kilómetros según ciclo WLTP y acepta cargas rápidas en corriente continua a 200 kW y en corriente alterna en 22 kW.

Tras un uso intensivo en condiciones reales, vemos que el consumo es algo superior a los 18,5 kWh/100km que homologa, pero no llega a dispararse en exceso. Vemos que la mayoría del tiempo nos movemos en torno a los 25 kWh/100km, aunque también es cierto que no pisamos mucho los entornos urbanos que benefician los consumos. Eso nos deja con que la autonomía real entre cargas rondará los 450 kilómetros, una cifra bastante aprovechable.

Opinión coches.com

No hay duda de que el Mercedes EQS 580 4MATIC es de esos modelos que ha ayudado a revolucionar el segmento de las berlinas de lujo. Con las ventas a la baja durante la última década se ha optado por electrificación y tecnología para llamar la atención de aquellos clientes pudientes que valoren esa imagen de buque insignia y el viajar en las plazas traseras. Por eso, el confort es absoluto en este modelo de origen alemán, que presume de todo tipo de comodidades en el interior y también queda reflejado en el comportamiento dinámico.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que no se trata de un coche hecho para todos los mortales. Como buen vehículo de lujo, tiene un precio elevado que en este caso parte de 130.000 euros. Hay otros rivales eléctricos que están por debajo, pero aquí aparece el aura de la marca de la estrella y la apuesta segura al tener el bagaje del Mercedes Clase S, que siempre ha sido la auténtica referencia en el segmento.

Mercedes EQS 580 4MATIC

7.9Nota

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