Hace poco más de un mes, el Rimac Nevera batió el récord 0-400-0 km/h con un tiempo de 29,93 segundos. Poco ha durado el hito ya que el propio Koenigsegg Regera batía este récord y su propio récord de finales de 2019 de 36,44 segundos. El rey recupera el trono.
Récord tras récord, revancha tras revancha el hiperdeportivo híbrido de Koenigsegg rebaja con holgura los 29,93 segundos del Rimac y su anterior récord, llegando hasta los 28,81 segundos. Eso sí, con un par de ases bajo la manga: los neumáticos y el factor terreno.
Según Koenigsegg, el hito ha sido posible gracias los nuevos neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2 R. Unos neumáticos semi-slick diseñados para el rendimiento extremo de una prueba de competición pero adaptados y homologados para la carretera. Para que te hagas idea de la importancia de estas gomas son las gomas que equipan Porsche, Mercedes-AMG, Chevrolet Corvette y Ferrari. Cosa fina. Haciendo una búsqueda rápida por internet vemos que su precio oscila entre los 1.100-1.200 por unidad, por si tienes el capricho, ahí te lo dejamos.
Estas son las cifras que se han cosechado en la prueba.
- 0-400-0 km/h: 28,81 segundos.
- 0-400 km/h: 20,68 segundos.
- 400-0 km/h: 8,13 segundos.
La historia del Regera
Presentado en 2015 en el salón de Ginebra tiene una potencia total combinada de 1.510 CV y 2.000 Nm de par, con un peso de 1.420 es obvio que vuela. Más allá de las cifras, la clave de este vehículo es el motor 5.0 V8 Biturbo y su transmisión direct drive, sin caja de cambios.
La KDD, como la llaman en la firma, permite jugar con los regímenes óptimos de los cuatro (sí, cuatro) motores que monta el coche, concatenando una jugosa y meticulosa gestión electrónica que confluyen en una sintonía perfecta de ingeniería. Así, contado con mucha grandilocuencia. Y si queréis que profundicemos, nos lo dejáis en los comentarios ;).
La producción final de este coche empezó en 2018 y en 2022 se entregaron todos los coches pedidos, evidentemente, sold out. Te dejamos el vídeo oficial de la prueba donde se ve cada cada tiempo vapuleado y a un piloto que parece que está disfrutando como un niño chico.