Un vehículo con capacidad de hasta nueve plazas, eso es el Volkswagen Caravelle. Si el Multivan es la variante de la Transporter T5 para llevar pasajeros, la Caravelle recoge sus mejores cualidades de confort y versatilidad y le suma la capacidad de transporte de personas y funcionalidad del Transporter.
Actualiza al modelo presentado en 2003 y comparte el mismo elegante aspecto exterior que el Multivan, aunque se ofrece en dos batallas diferentes de 3.000 y 3.400 mm. Exteriormente destaca por tener los parachoques, espejos exteriores, tiradores de las puertas y molduras laterales en el color de la carrocería, así como la carcasa de los intermitentes posteriores y laterales en blanco.
Otro elemento característico son los faros delanteros de doble óptica que, junto a la rejilla del radiador ribeteada por un perfil cromado, le otorgan un frontal característico.
Pero la característica fundamental de la Caravelle es su versatilidad. El Caravelle ofrece de serie ocho plazas, distribuidas en tres filas: dos asientos en la zona de cabina, tres en primera y otros tres en segunda fila y, opcionalmente, se puede añadir otra plaza mediante la incorporación de un asiento doble en la plaza del acompañante.
Además, la distribución del espacio interior puede adaptarse con facilidad a las diferentes necesidades del usuario gracias a la gran modularidad de la cabina que permite extraer los asientos o abatirlos totalmente.
La versatilidad de este vehículo queda reforzada por la incorporación de una puerta deslizante lateral de 100 cm de ancho que facilita la carga de cualquier tipo de equipaje. Además, ofrece la posibilidad de incorporar puertas correderas eléctricas en ambos laterales, así como una doble puerta posterior con ventanas.
Volkswagen Caravelle 2009. Motores
En cuanto a los motores, se ofrece en combinación con tres motorizaciones diésel, las mismas que se comercializan para el Transporter: un motor 2.0 TDI de 104 CV, 140 y 170 CV, mecánicas que destacan por sus excelentes prestaciones de marcha y sus ajustados consumos.
Estos dos pueden combinarse con un cambio manual de seis velocidades, que también mejora notablemente los niveles de consumo de combustible gracias a que las seis marchas permiten una mejor adaptación de las relaciones a las diferentes circunstancias de uso, o con cambio automático también de seis marchas. Además, el Caravelle se ofrece con tracción integral 4Motion.
Fuente: Volkswagen
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