Si hoy quieres un Jeep Renegade con tracción total has de elegir las versiones 4xe híbridas enchufables. Para mejorar el atractivo de las mismas llega el Jeep Renegade Upland, con detalles de diseño que lo diferencian del resto de la gama.
Esta edición especial destaca por incidir en las capacidades todoterreno del SUV pequeño (que conocimos en nuestra prueba del Renegade Trailhawk). La carrocería está disponible en cinco tonalidades. A los negro, blanco Alpine y rojo Colorado se suman el gris Sting (en las imágenes) y el azul Shade. Todas las opciones –salvo el negro– pueden combinarse con un techo negro.
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Así, en el interior, encontramos una tapicería que se puede lavar sin problema, en tela negra con inserciones en color bronce, a juego con el color MetaKrome de los marcos de los altavoces delanteros o los de los aireadores del aire. También cuenta con volante Tecno forrado en cuero.
Como decíamos al inicio, el Jeep Renegade Upland es un SUV híbrido enchufable. El apartado mecánico queda reservado a la versión más potente 4xe de 240 CV de potencia total fruto de combina un motor turbo de gasolina de 1.3 litros con dos motores eléctricos, asociados a una transmisión automática de seis velocidades. Gracias al paquete de baterías de 11,4 kWh de capacidad, puede recorrer hasta 50 km en modo 100 % eléctrico.
Basado en la terminación Limited, el Jeep Renegade Upland tiene de serie faros Full LED con luces de carretera automáticas, faros antiniebla o raíles en el techo. En el interior del habitáculo, el Renegade ofrece una pantalla TFT de 7 pulgadas para el cuadro de mandos y Uconnect con pantalla táctil de 8,4 pulgadas, compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Entre los asistentes de seguridad, de serie incluya ayudas como la alerta de colisión frontal, sistema de gestión activa de carril o el control de velocidad adaptativo.
Fuente: Jeep
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