Hay un buen número de coches familiares híbridos enchufables en el mercado. Y entre ellos, alguno con una estética realmente atractiva sin tener que ir a una marca premium, como el Peugeot 308 SW. Se trata de un coche, como vimos en nuestra prueba, que incluso en un acabado intermedio y en color blanco, hace girar cabezas a su paso y la gente te pregunta por él.
No es su única virtud. Tiene un interior de bastante calidad y una puesta a punto muy equilibrada, que sin buscar la deportividad extrema consigue transmitir confianza al volante. Sus consumos son buenos, mejor cuando usas con cabeza la energía de las baterías. Te lo explicamos en vídeo:
No todo es perfecto. En marcha, hemos visto que su autonomía eléctrica en condiciones reales de utilización es menor que algunos rivales directos.El puesto de conducción (el i-cockpit) no está hecho para todos los públicos y las plazas traseras son bastante escasas, un punto débil para un coche de esta filosofía. Lo compensa un buen maletero, poco condicionado por su sistema de propulsión.
Su precio de 38.130 euros parece elevado, pero cuando analizas sus riveles, solamente el Kia Ceed Tourer PHEV es algo más barato, siendo eso sí mucho menos potente. El Renault Megane Sport Tourer o el Seat León Sporstourer eHybrid son más caros. Su mayor rival va a estar en casa, el Opel Astra Sports Tourer PHEV que, por ahora, no ha llegado al mercado.
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